“África es depositaria de un tesoro inestimable para el mundo entero:
su profundo sentido de Dios” (Benedicto XVI)
Las Apostólicas del Corazón de Jesús estamos presentes en Angola con dos comunidades: una en la capital (Luanda), en el barrio de Cazenga, y la otra en la provincia de Malange, concretamente en un pueblo llamado Quela. Agradecemos todo lo que este pueblo nos aporta con su perseverancia, resistencia al sufrimiento, su fe y su visión de la vida. En Angola, descubrimos que Dios está presente como Aquel que la vida está por encima del hambre, y de la pobreza; es la fuente de la que manan los deseos de seguir adelante y de avanzar. Valoramos la fiesta y la danza ante cualquier situación: “Calma só”. Damos gracias a Dios por vivir en este país, que supone un gran cuestionamiento y enriquecimiento para nuestra vida. Agradecemos también la relación de afecto y cariño que se van dando en estos años con el pueblo angolano, por sus muchos gestos y detalles: sentimos que les queremos y que nos quieren y nos cuidan.
Las Apostólicas en Angola trabajamos en diferentes ámbitos: educación, derechos humanos, salud, acompañamiento a las comunidades cristianas…, pero nuestra vida aquí es, sobre todo, una “apuesta” por:
- Fortalecer las instituciones para favorecer que se puedan conseguir cambios estructurales.
- Vivir otro modelo de liderazgo, desde la reciprocidad, la solidaridad y la corresponsabilidad.
- Ser semillas de esperanza y testigos de la Buena Noticia que acontece diariamente en el pueblo angolano.
- Reconocer el paso de Dios en los hechos que muestren la resilencia de este pueblo y agradecerlos.